El saco ideal

Rebeca estaba feliz, pues ya era viernes y llegaba el fin de semana para descansar. Además, era Casual Friday en su trabajo y moría por estrenar un saquito negro que había comprado con un solo botón y una abertura en la parte delantera, que estaba muy de moda. Se alistó, se cambió y manejó rumbo a su trabajo.

Todo parecía marchar sin novedad, hasta que se abrió el ascensor y algunos de sus compañeros vieron a Rebeca con asombro: ¡Definitivamente ese no era su saco ideal!

Uno de los principales errores que comete la mayoría de personas es comprarse algo porque está de moda, pero sin fijarse si le queda bien o mal: ¡Es lo último que se está usando! ¡Es la nueva colección! ¡Lo tengo que comprar si o si! Pregunto: ¿Aunque te quede fatal?

¿Y si soy flaca? ¿Y si tengo demasiadas caderas? ¿Y si tengo los hombros anchos? ¿Y si tengo el torso largo? Tranquila, aquí los principales tips para tu saco ideal según tu tipo de cuerpo.

Oval (contextura gruesa):

En el caso de Rebeca, es decir para las mujeres gorditas, por más que esté de moda los sacos con un solo botón y con una abertura en la parte delantera ¡No es recomendable usarlos, y menos cerrados! Sino dará la sensación que debido al peso de la persona el saco se abre. Lo mejor para las mujeres de contextura gruesa es usar un saco clásico, de preferencia de corte recto en la parte delantera, de un solo color y llevarlo abierto para que haga contraste con la blusa que usas dentro (que debe ser de otro color), así dará la sensación que eres más delgada pues estarás formando un rectángulo en tu torso.

Triángulo invertido (hombros anchos):

Si eres de las personas ancha de hombros, y con menor cintura y caderas, el objetivo será distraer la atención de la parte superior, para eso hay que equilibrar la visibilidad entre el ancho de tus hombros y el ancho de tus caderas. En este caso el saco ideal para este tipo de cuerpo es un blazer de un solo botón, sin panqueques de preferencia, que sí cuente con una abertura en “A” desde la cintura hacia abajo.

Rectángulo (delgada):

Si eres delgada, la proporción de tus hombros va a la par con la de tus caderas, y no tienes mucha cintura, definitivamente tienes una ventaja pues puedes usar todo tipo de sacos, tanto los que tienen mucha información como lo son los estampados, los sacos tipo tejidos, los de rayas horizontales, como los de color entero. Prueba con un saco tipo Chanel, lo llevarás de maravilla ya que por más tejido e información que tenga (bolsillos, los bordes de hilo sobresaliente), no se te verá ancha, por el contrario, se te verá divina.

Triángulo (caderas anchas):

Si eres de caderas anchas, y tienes hombros pequeños, el objetivo es disimular la voluptuosidad de la parte inferior de tu cuerpo y resaltar o tratar de mostrar en mayor medida la parte superior de tu torso y los hombros. En este caso uno de los sacos que recomiendo es un estampado, que tenga panqueques de preferencia, que no sea demasiado largo sino tapará tus caderas y tampoco queremos eso, un saquito hasta la cadera alta o hasta la cintura quedará perfecto. Luego, en la parte inferior puedes usar un pantalón de corte recto o un vestido corte rectangular, de un solo color, el ideal: negro. Recuerda que el color negro tiene la particularidad de adelgazar visualmente.

Reloj de arena (cintura pequeña):

Si tu cuerpo es de hombros y caderas equilibradas, de igual proporción, pero de cintura pequeña, entonces el objetivo no es resaltar más tus grandes hombros y tus grandes caderas, como lo hacen desagradablemente algunas mujeres voluptuosas, sino por el contrario es tratar de ocultar esa voluptuosidad de la parte inferior y superior de tu cuerpo y resaltar tu cintura. Para ello recomiendo llevar un saco recto, de preferencia sin bolsillos, que tenga caída ligeramente sobre tu cuerpo es ideal, es decir, que siga tu silueta sin que se marque demasiado. Me refiero a un saco tipo boyfriend.

Como vez, sacos hay miles, pero está en ti tener la capacidad de escoger, de no comprar por el simple hecho que esté de moda y convertirte en una Fashion Victim, sino de hacer una elección inteligente y adecuada según tu tipo de cuerpo, y sobre todo pensando en quién eres y en la imagen que quieres proyectar: ¿Seguridad? ¿Curvas? ¿Seriedad? ¿Voluptuosidad?

Sé sincera contigo misma al momento de elegir una prenda, y si no sabes qué tipo de cuerpo tienes o que saco te queda mejor, busca ayuda profesional. Búscame, y te ayudaré a escoger tu saco ideal.

Besos,

Claudia