viernes, 27 de noviembre de 2015

La Libertad

Asustada y con el rostro completamente cubierto corría de un lado a otro Yadigar, una joven musulmana de 15 años que nunca había visto una mujer de occidente, lloraba de dolor porque su padre le había pegado muy fuerte.


Horas antes Yadigar había Intercambiado unas palabras con una turista norteamericana, congeniaron rápidamente y ambas contaron un poco acerca de sus costumbres la una a la otra. A Yadigar le parecía increíble ver a una mujer en short, con blusa manga cero y con el cabello suelto. Yadigar quiso mostrarle a la turista que tenía un cabello tan bonito como el de ella, así que decidió retirarse el turbante de la cabeza, y por un costado le mostró su hermoso cabello largo hasta la cintura! Lamentablemente eso está prohibido para las mujeres musulmanas y para mala suerte de Yadigar, su padre la vio. Algunos hombres que estaban a los alrededores habían visto su cabellera, esto era un signo de provocación y no tuvo más remedio que pegarle, y muy duro.


Sentirnos libres es muy importante. Es bueno para el corazón, para la mente ya que gracias a la libertad podemos hacer las cosas que más nos gustan, vestirnos como lo deseamos, maquillarnos, hacer todo!
Pero lamentablemente no todas las mujeres del mundo tienen la libertad de sentirse así. En muchas partes hay muchas injusticias para con la mujer. Y es que a veces son solo costumbres diferentes a las de nosotros por tratarse de otra cultura, pero nos es difícil de entender. ¿Qué diferente es una mujer de occidente con otra de medio oriente, verdad?


Con esta reflexión no pretendo juzgar a las mujeres musulmanas, pero es la realidad, sus costumbres son muy diferentes a las de nosotros y hay tanto machismo que lamentablemente es permitido. Por eso debes agradecer por lo que te tocó vivir, agradecer por poder caminar y poder ponerte una minifalda o vestido, por tener una cabellera que puedes lucir y que muchas mujeres lo tienen prohibido, por usar un bonito escote, hasta debes agradecer por poder respirar!


Y no creas que la libertad es símbolo de rebeldía o de figuretismo, o que la libertad es un tema que se vive mucho en nuestros tiempos. La libertad viene de antaño, es anhelada, deseada, aclamada tanto en la actualidad como en los años 70 o en el siglo XIX, y muchas veces para ponerla en práctica había que tener coraje!!


Vive al máximo y sonríe siempre. Saca la niña que llevas dentro y déjala ser libre para que pueda alcanzar sus sueños.


Besos,

Claudia

jueves, 12 de noviembre de 2015

El aseo personal

Verano del 2010, caía un sol intenso que casi quemaba la piel. Todos en la oficina con un nivel de concentración nulo, y es que el aire acondicionado se había malogrado en la época más calurosa del año. Esmeralda, la colaboradora más antigua en la empresa del área de limpieza andaba de un lado a otro en la oficina como de costumbre, pero ese día se le hizo tarde. El despertador no sonó y estaba más ajetreada que nunca por llegar tarde al trabajo. Se levantó con el tiempo justo, se vistió y salió de casa incluso sin desayunar. Conforme iban pasando las horas, Esmeralda iba interactuando con sus compañeros hasta que se empezó a sentir un ambiente cargado, con aromas no muy agradables alrededor de ella. Y lo peor del caso es que nadie le decía nada.


Dos semanas después de ese incidente, volvió a suceder, pero esta vez nadie quería acercarse a ella. Esmeralda se sintió mal, muy incómoda y poco tiempo después presentó su carta de renuncia. Nunca supo el verdadero motivo de por qué sus compañeros se alejaban de ella siempre.


El aseso personal es tan importante como la alimentación diaria. Es nuestra carta de presentación no solo en el ambiente laboral, sino con nuestros familiares directos, padres, hijos. Por ello, lo primero a tomar en cuenta es una buena ducha diaria. El bañarse desestresa, relaja y hace que te sientas bien, además que el contacto con el agua es súper fresco. Lo mejor es hacerlo al empezar tu día, pero si estás con ese terrible frío típico de invierno, sin querer salir de cama, descuida, cuando pongas la temperatura caliente en la ducha imagínate que seguirás abrigada en cama. Te sentirás mejor y lista para empezar tu día.


Otro punto importante que no se debe dejar pasar de lado es utilizar cremas diarias para el cutis, manos o codos. En general por la misma alimentación o rose con la ropa o con el mobiliario la piel tiende a resecarse, y peor aún si no tomamos agua. Una piel tersa siempre se verá fresca y joven.


Un punto que jamás deberá pasar desapercibido es la higiene bucal. Es fundamental cepillarse los dientes por lo menos 3 a 4 veces al día: al levantarnos, luego de desayunar, luego de almorzar y luego de cenar o al acostarnos.


Y podría seguir enumerando más y más ejemplos de todo lo que uno debe hacer para estar bien en el día a día en cuanto a higiene se refiere. La lista es innumerable, pero la actitud y ganas de hacerlo son muchas veces las que faltan. Que la flojera no te domine, no lo hagas por los demás o por el qué dirán, hazlo por ti misma para conservarte mejor. Recuerda, tu cuerpo te lo agradecerá eternamente.


Besos,

Claudia